Mis padres no tenían mucho dinero para
comprarme videojuegos por aquel entonces y tuve mucha suerte de tener unos
pocos juegos para Nintendo DS (Nintendogs que vino de serie con la consola,
Metroid Prime Hunters, Final Fantasy III (mi primer FF debo decir), Final
Fantasy IV y algún que otro suelto comprado de segunda mano que eran algo
chapuceros… (si, el resto por tarjeta mágica que me “ayudó mucho”). Pero, entre
ellos, destacó uno por encima de todos. No recuerdo cuando ni porqué me lo
compraron, ni si yo lo pedí por algún motivo concreto, me dejaron elegirlo o
fue… inspiración divina para mis padres. Pero allí estaba.
Se llamaba Animal Crossing Wild World, y lo que
si recuerdo era quedarme embobada mirando la portada del juego intentando
descubrir porqué habían dos niños con una manzana sobre un planeta redondo con
animales a su alrededor como ciudadanos normales.
Al mismo tiempo, cuando aún compraba la Nintendo
Acción, en ese mes llevaba un DVD promocional dónde había una guía de Animal
Crossing (que aún recuerdo y que gracias a un alma altruista de Youtube, puedo
rememorar) bastante completa que duraba unas cuantas horas y yo me la tragué
entera varias tardes. Es posible que en realidad este fuese el motivo de porqué
me compré el juego, por el DVD promocional que me hizo enamorarme del juego…
¡mira, puedo vivir yo con mi personajillo en mi propio pueblo con mis vecinos
con un montón de coleccionables! FLIPÉ.
Lo que significó para mí fue todo. Encima
coincide en otra de esas épocas difíciles y duras de mi vida. Encender el juego
por primera vez me alucinó al ver a Capitán en el taxi. Tenía muchas ganas por
ver cómo sería el mapa de mi pueblo y los vecinos que me tocarían. La primera vez reinicié bastantes veces el
juego, incluso tras un mes entero de juego cuando ya conocía un poco más lo que
me rodeaba. Incluso, de las pocas veces que tenía internet (que solo lo tenía
en el instituto o en casa de mi abuela) en casa de mi abuela me imprimí una
imagen en plan lista de todos los vecinos (por especie) del juego, y los iba
marcando según ya los tenía e iba conociendo (¡era como coleccionarlos a ellos
también!).
Así me enamoré de vecinos como Jereza, Celeste
o Jacinto. Y que se fuesen me sentaba tan mal que hasta lloré durante dos días,
especialmente en el caso del tercero… que boba o que inocente, ¿no? :P
El juego me atrapó y absorbió de forma
increíble y no quería separarme de él. Durante meses solo tenía ojitos para
este juego (aunque a veces también lo turnaba con el Hunters y los otros, o
volvía a GBA (la tarjeta mágica llegó un poquito más tarde), pero era el que
más ocupaba mi tiempo), hasta que en un reinicio acabé con mi pueblo definitivo
del que aún recuerdo casi a la perfección el mapa: Boboland. Recuerdo incluso
las primeras vecinas que tuve en ese pueblo: Piluca, Pinta y Praliné.
Recuerdo pasarme días enteros en la cama de mi
habitación jugando a Wild World siendo totalmente absorbida por el juego… todos mis problemas se esfumaban y me encantaba
hablar con mis vecinos. Me pasaba la mayor parte del tiempo pescando o haciendo
cierto truquillo con los vecinos (esperar 5 minutos a que no me viesen y luego
buscarlos para que se sorprendieran al verme y que me hicieran peticiones, que
funcionaba y podía ocurrir con todos y no solo con uno como en New Leaf…
TTnTT).
Disfruté mucho de los eventos (aunque
pareciesen muy simples, como el Día Lalalá y el Día Guay, o especialmente el
Mercadillo) y los vecinos tenían más personalidad, mucha más variedad de
conversaciones y peticiones y a mi gusto más originales o divertidas que las de
ahora con New Leaf (y no es una opinión exclusiva mía, ya que ya lo he ido
leyendo estos años varias veces por foros).
También fue mi primer juego con el que probé
por primera vez el online. Mis padres no tenían internet, pero mi consola
pillaba un wifi de algún vecino que se le olvidó añadir contraseña. Solo
llegaba a una parte concreta de la casa pero era una señal bastante fuerte y me
permitió jugar con WW (del foro “mianimalcrossing”, de los más famosos y
concurridos aquel entonces y que aún siguió muchos años después) por online con
gente que conocí de un foro (aunque la “amistad” fue efímera, pero al menos, la
experiencia estuvo ahí).
Y qué decir de la gata Blanca lo divertido que
era dibujarle una cara. Lástima que siempre me quedé con ganas de completar el
evento de Cati y Catiana, porque nunca podía volver a quedar con la gente que
pedía cuando llegaban al pueblo. Ah, y me gustaba que tuviese menú de Opciones
(tenías que ir al ático de tu casa y llamar por teléfono eso sí), en el que por
ejemplo podía cambiar el idioma de mis vecinos (cosa que ahora echo en falta).
¡Y los hacks! Aún recuerdo los asientos
invisibles y el panal de abejas (si, antes no se podían conseguir como un
objeto), por suerte no estropeaban el juego (aunque sé que habían otros que si
lo hacían, por suerte a mí nunca me ocurrió nada).
Lo que no me gustaba del juego es que no tuve
forma de conseguir la última expansión de la tienda hasta pasados muchos años
más tarde. Primero porque no sabía cómo se conseguía en un inicio, y segundo
porque cuando quedaba por wifi siempre se me olvidaba pedir ayuda para
conseguirla: otro jugador debería ir a tu pueblo y comprar algo en tu tienda de
Tom Nook (espero que no hagan algo así en el de Switch… odio pensar en la idea
de que tenga que pagar online para visitar otros pueblos… cuando esa opción
llegó a nuestra vida y a los videojuegos nadie nos dijo las consecuencias que
realmente traería internet de forma negativa…).
En el instituto había una chica con más o menos
mis mismos gustos que también tenía este juego y nos hicimos el favor entre las
dos (otra amistad que llegó a nada porque me “abandonó” en mis momentos duros
en el instituto y después de aquello corté de raíz la amistad, pero bueno, al
menos algo positivo me llevé), y así conseguí la última expansión de la tienda
de Tom Nook con la peluquería. No me gustaba la idea de hacer el test porque
quería elegir a mi gusto peinado y color, y no me sabía de memoria el test,
pero por suerte conseguí el peinado que quería: el moño de color naranja…
¡prácticamente como salía en la guía del dvd promocional! Se me quedó grabado
para siempre ese peinado.
Además… cuando llegaba mi cumpleaños los
vecinos siempre me felicitaban. Me enviaban cartas o alguno de ellos me visitaba
en persona para darme una tarta de cumpleaños. Ya era más que lo que me ocurría
en la vida real, así que por eso creo que me afectó más que me encantase este
juego y no quisiera separarme de él. Nochevieja también era mágica, y aunque en
algunos meses del año apenas hubiese eventos, no me importaba. No sé, era
feliz. Las situaciones, el tiempo que volaba cuando jugaba, la variedad de los
vecinos y sus conversaciones, todo un mundo nuevo por ir descubriendo poco a
poco y maravillándome con las posibilidades que puede ofrecer…
¿Y las melodías? Puede que sea el primer juego
de la saga y por eso me gustasen tanto, pero sigo enamoradísima de las melodías
de Wild World. Aún resuenan en mi cabeza de vez en cuando y no puedo evitar
(literalmente) silbar al ritmo de algunas de ellas. Y cuando suena la intro del
juego, es que directamente exploto y lloro de alegría y melancolía. Con New
Leaf no me ha enganchado ni impactando tanto la banda sonora, de hecho en
algunos puntos me parece bastante sosita y poco memorable… En WW había
madrugadas que me quedaba despierta los fines de semana para escuchar la música
de la una y las dos de la madrugada sobre todo (y parece que no he sido la
única).
Más tarde, salió “Let’s Go to the City / City
Folk” para Wii. Pero hasta 2011 no tuve la Wii. De hecho lloré durante una
semana por no tener la Wii y no poder comprarme este juego. Leía que no era
para tanto, pero tenía objetos, personajes y eventos que jamás podría ver con
mis propios ojos, y quería jugar con todas mis fuerzas y hasta mi último
aliento a ese juego. Siempre me quedé con las ganas. Más tarde también descubrí
que hubo un juego de la saga en Game Cube… ¡me cachis!
En su momento yo quería esa consola y mi padre
optó por comprar la PS2 (consola que más o menos nunca me gustó, total solo
tenía 2 juegos y un montón de demos cutres y apenas me dejaba tocar la consola…
¡al menos con Game Cube seguro que hubiese sido diferente!).
¿Por dónde seguir, aparte de decir que esta
saga es MAGIA? Aunque pueden ocurrir dos cosas: que empieces a jugar y te
enamores de ella, o te parezca algo sin gracia y no te guste nada (aunque
todavía no he visto a alguien que la odie, simplemente que no le guste… como mi
marido :P). Es increíble como me “afectó” con un solo juego y como espero como
agua de mayo nuevos de la saga que mejoren todo lo anterior.
Hice hace tiempo un análisis crítico de AnimalCrossing New Leaf dónde dejo claro que me ha decepcionado bastante en algunospuntos (si, si una saga me gusta, siempre exijo lo mejor, y lo dejo muy claro)
y que no me transmiten las mismas sensaciones que Wild World. Es posible que
sea solo porque aquel fue el primero y de ahí la magia más pura, pero en
algunas cosas (vecinos, melodías, algunos eventos menos, streetpass…) la
decepción si que estuvo ahí un poquillo marcada, y eso que mejora y añade
muchísimas otras.
Aunque bueno, toda saga importante de Nintendo
comienza a sobrexplotarse cuando llega al punto de que vende por millonadas,
como es el caso de Happy Home Designer, Amiibo Festival y las tarjetas amiibo
(del juego de móvil es que prefiero pensar que ni existe y la actualización de
New Leaf es otra decepción para mí…). Verlos me produce cierto tipo de tristeza
por el uso que se les ha dado.
Espero que en Switch hayan dado pasos más allá.
Que Happy Home Designer y Pocket Camp sean ‘experimentos’ para añadir algunas
de sus mecánicas a ese futuro juego (mejor forma de decorar, locales como
restaurantes o centros médicos, etc), que mejoren las conversaciones y ‘eventos’
(o añadan) de los vecinos, más variedades de ellos, más insectos y peces, más
actividades por hacer en ciertas épocas del año (por ejemplo guerra de bolas de
nieve en invierno), más eventos o visitantes especiales, mucho más.
Sinceramente, con el tiempo conociendo ahora el
panorama de los juegos de PC, un juego de Animal Crossing (o de su mismo
estilo) estaría genial en PC. No solo porque es una plataforma dónde jugar a
videojuegos con mucho más espacio de disco duro y opciones (¡y online gratis!),
sino por la posibilidad de añadir mods o descuentos de los juegos alucinantes.
Y muchas actualizaciones constantes fáciles de descargar (en consola, incluso en
Switch, lo veo dificilillo, aunque también se pueda), no sé si me explico. Y
vamos, que lo parte. Lo peta.
Animal Crossing Wild World significó muchísimo
para mí y sobre todo sus melodías me acompañarán a todas partes. Siempre estoy
a la expectativa de nuevas noticias sobre Animal Crossing. Siempre sueño con
nuevas formas de enamorar a la gente en un Animal Crossing.
Si pudiese, creaba mi propio estudio indie y miprimer videojuego sería (no el del cómic como primero) uno al que en nombre enclave llamo ‘Sweet Home’, que es… el Animal Crossing definitivo. Hay muchasentradas de este por este blog, pero en resumen: tu personaje hasta tendría
hambre o salud, podría ponerse enfermo, habrían recetas por coleccionar y
cocinar, muchos eventos y subtramas o mini eventos, locales como rayos uva,
restaurantes, guardabosques, parques de atracciones, minijuegos deportivos (¡incluso
juegos olímpicos!), piscinas, patinaje, minas dónde buscar vetas de minerales y
piedras preciosas, tesoros y reliquias para donar al museo, ovnis everywhere, y
muchas cosas más.
Sinceramente, sé con “certeza” que este juego lo petaría.
Añadiendo además contenido constante gratuito cada poco tiempo y con
actividades reales con la comunidad, haríamos una comunidad enorme unida con el
juego que nadie sería capaz de superar.
¿Me he fumado algo gordo? :P Es posible, pero
solo pensadlo.
Gracias Animal Crossing.
PD: No sé que le ha pasado esta entrada al escribirla pero el tamaño de la fuente (la letra) no puedo hacerla predeterminada y no sé que más hacer ya. Disculpad las molestias =_=
Ais, mi primer AC fue el New Leaf, pero tambien me trae muchísimos recuerdos, especialmente del primer verano en que lo conseguí, que me pasaba los días y las noches enganchada, fue genial. Es uno de los juegos que más he explotado y estoy deseando que saquen uno bueno para Switch. Me decepcionaría bastante que hiciesen alguna basurilla como el de WiiU... Necesitamos ya un juego de AC bueno y completo >_<
ResponderEliminarMuy buena entrada :)
Mientras no se abuse de dlc's, amiibos, conexión online para conseguir ciertos objetos o cosas o pases de temporada... XD lo esperaré como agua de mayo.
EliminarAl final, Animal Crossing creo que se ha convertido en un vende consolas para Nintendo.