Es innegable que a todo el mundo le gustan las cosas gratis. ¡No gasto dinero de mi bolsillo y me queda para otras cosas importantes! Sin embargo, hay muchos videojuegos que merecerían tener un precio justo porque se lo merecen, y se lo merecen las personas que han conseguido y logrado hacer estos videojuegos. Hay algunos que, aunque los videojuegos sean superproducciones, hoy en día parecen más bien juegos mediocres que hace años se les hubiesen echado la crítica y la gente encima por la mediocriedad en los juegos o el trato a los jugadores, en ocasiones abusivos... que se merecen mucho menos que los juegos de "menor calidad" o mejor dicho, menor dinero en la producción.
La imagen tiene poco que ver, pero mola mucho. Menudos precios algunas y que cambios. De las videoconsolas ya hablaré en otra ocasión, porque estoy muy poco puesta en precio de componentes y demás de las consolas. Pero más de 300/400€ no pagaría nunca por una de ellas.
Sin embargo, siempre me parece un error poner los precios de juegos digitales, por muy superproducciones que sean o muy novedosos que puedan ser, igual de caros o incluso más que los juegos en físico. Para empezar, te evitas el transporte y los materiales de un juego físico, también por ejemplo el papel de las portadas o los manuales (o la publicidad), el cartucho o el disco y otros costes. Y hoy en día, pagar cierta cantidad de dinero en versiones en físico cuando ni siquiera tiene el disco dentro y solo tiene un mero código, es cuanto menos, a mi gusto un robo. Por no traer si quiera el disco/cartucho de juego, debería rebajarse parte de su precio final, sin descontar el papel o la caja, el envoltorio y lo que lo acompaña al juego.
En digital, me parece sangrante ver juegos "triples AAA" o importantes a un precio elevadísimo de sesenta eurazos (en ocasiones hasta setenta), cuando no tiene ni por asomo los mismos costes de un juego en físico. Como mucho, si un juego "triple a" costaría originalmente sesenta euros en físico (o más) y en digital, lo rebajaría a unos cuarenta o treinta pocos euros. ¿Que menos, no? Eso si, luego nos encontramos con juegos que de verdad se merecen menos que otros aunque sean los de superproducciones del copón.
Luego están los juegos indie, que junto a muchos descuentos y ofertas especiales a lo largo del año, tienen precios muy competitivos y buenos, tentadores muchos casos, aunque también está el problema que puse hace muchas entradas atrás, que la gente se coge juegos baratos o gratis sin conocerlos y en ocasiones, sin tocarlos nunca, solo para llenar la biblioteca de juegos y a veces eso es peligroso, porque no se valora a los juegos como tales y seguramente algunos pasarán sin pena ni gloria sin conocerse de ninguna manera.
Algunos juegos indie pueden rebosar mucha más calidad que otros ciertos juegos, a pesar de que por ejemplo, los gráficos no sean tan punteros o molones que los de consolas o juegos potentes, pero sean más divertidos, adictivos y más buenos en ocasiones, o se lo merezcan más sus creadores que las compañías de los juegos grandes. Sin embargo, hay algunos juegos indie que aprovechándose del hype de antigua nostalgia o promesas muy altas, aunque no quiero decir que con esto los juegos sean malos, los ponen casi igual de caros que los juegos más grandes y en ocasiones, a precios altos a pesar de tener versiones digitales. Lo que me parece un error y de un descaro bastante evidente.
¿Como sería elegir el precio que un jugador quiere pagar por el juego que quiere comprarse? Muchos elegirían un precio menor al que originalmente debería costar, eso hay que reconocerlo, lo más barato siempre tienta más, y como no, ayuda bastante a que la cartera siga teniendo fondos y a comprarse más juegos, pero si por ejemplo hemos probado el juego y/o queremos ayudar, podemos pagar un precio un poco más elevado para esa persona que de verdad se lo merece (por ejemplo con topes de 2€ como muy barato y 13-20€ como muy caro, etc), sin llegar a darlo nunca gratuito. Lo gratuito tienta mucho, pero nunca me parece justo dejar algunos juegos gratuitos, aunque depende del caso, como juegos muy antiguos, ofertas de tirar la casa por la ventana, etc.
En mi caso personal, el tope que me gustaría pagar por todos los videojuegos, sin redondear exacto, estaría entre los 20-30€, dependiendo de los juegos, su duración, calidad, diversión, etc, incluso si se lo merece quiénes hayan creado el videojuego, y dependiendo también de mi cartera, claro está. El mínimo que pagaría, siendo justa, sería entre 2-5€. Si el juego que me interesa es gratis y me pilla en un momento malo en mi economía, pues lo aceptaré con ganas, yo lo reconozco. Pero siempre diré que, si un juego de verdad merece cada céntimo que pide, se lo merece de verdad, ¡y corred insensatos a por él!
Yo flipo cada vez que veo juegos en digital al mismo precio que en cartucho. O sea, la gente que los compra así... ¿Hola? Si no se fabrica en físico, adelante, pero si sí, por favor, que se estropea la consola y adiós, especialmente en el caso de Nintendo.
ResponderEliminarYo no creo que los juegos debieran ser gratis, pero sí tener un precio más rebajado. Unos 20-25€ estaría muy bien para portátiles, y unos 30-35€ para sobremesa.