Agobio, ¡estrés!

Muchos pensarán que qué estrés ni leches voy a tener yo, si la mayor parte del tiempo me la paso en casa, escribiendo chorradas por los foros, escribiendo mis proyectos, haciendo cosas del hogar y raras veces estudiando (si, he tenido unos problemillas que ahora explicaré). Pero mira, creo que desde siempre he tenido estrés. A lo mejor hasta va a ser crónico y todo.

Siempre me he sentido agobiada por todo. Por cualquier cosa que hiciese. Incluso si estoy concentrada, de inmediato me agobio, me impaciento y lo dejo a mitad. Incluso si es algo que me hace mucha ilusión (como mis proyectos o el curso). De alguna manera, me agobio de forma que no es normal ni lo parece, haciendo que lo deje a mitad o aparcado para bastante más tarde, algo que a veces me frustra bastante.

Con el curso ha pasado algo parecido. Como llegué a las asignaturas de matemáticas e inglés, y eso se me da fatal esté dónde esté, comencé a desilusionarme y cada vez que me ponía a leer cada temario me sulfuraba y me agobiaba muchísimo. Durante la primera semana que me sucedió esto también tuvimos que hacer unos arreglillos con los papeles de nuestra boda (que a ver cuando nos llaman... ejem), a parte de ir a la de mi tía. Cuando me quise dar cuenta no me sentía con las mismas fuerzas que antes para hacer el curso, pero eso si, que quede claro que no quiero abandonarlo. Es solo ver las matemáticas y me desespero. Además, no había manera de instalarme cierto programa en el ordenador para hacer las pruebas de evaluación online, y a día de hoy sigo sin poder hacerlo aunque haya pedido ayuda al servicio técnico. Será que soy muy torpe con estas cosas, como siempre.

En fin, el caso es que envíe hasta un correo a mi profesora del curso, para decirle que, debido a estos problemillas, no he enviado las pruebas que me correspondían, pero que sigo en el curso. No tengo fuerzas de momento para continuar, me siento agobiada por todo. Incluso si intento relajarme, es que me siento agobiada por hacerlo. Es un poco sin vivir. Haciendo hasta las cosas que me gustan estoy a punto de reventar.

Supongo que me hará falta un buen cambio de aires. Le he cogido manía a la ciudad porque todas las tardes nos ponen música a toda leche detrás de nuestra casa, que si fiestuquis, que si perros ladrando toda la noche en nuestra calle o en alguna terraza vecina... no sé, me he agobiado demasiado. Pensar que me quedaré sola en casa unos cuatro días, que tenemos que ahorrar mucho, que parece que mi metabolismo está algo pachucho, y que a lo mejor no podremos hacer la luna de miel que queríamos...

Yo o en navidad o en nochevieja, me da igual cual de los dos, me apetecía por una vez hacer algo diferente. No me apetece nada ir los dos con la familia. Ya me he agobiado otros años al ir (ya sea con mis abuelos y con sus padres). Aunque sea por ejemplo en navidad por el mediodía a casa de sus padres y por la noche a casa de mis abuelos, pero no me apetece hacerlo dos. Ya estoy agobiada. Quiero hacer algo diferente, que todos los años es lo mismo. No me apetece quedar con gente que de momento no quiero ver ni en pintura, ni ir a cenar por ahí... tampoco me gustaría quedarme encerrada en casa, pero mejor con mi chico que sola. Es por ello, que queríamos hacer la luna de miel en Port Aventura y en una de esas dos fechas: o navidad o noche vieja. Los dos lo necesitamos. Él también tiene muchísimo estrés por el trabajo y siempre llega cansado, y nos aburrimos como ostras en casa. Lo necesitamos en serio.

Además, ya dijimos hace tiempo que haríamos la luna de miel en Port Aventura, como dios manda. Y ya prometí que me montaría en la atracción grande adrede si hacíamos ahí la luna de miel... si es que... Y en fin, la luna de miel se supone que tiene que ser algo memorable, aunque solo vayamos a estar tres días, ¿qué más memorable que eso?

Muchas ganas de la luna de miel siempre y cuando sea así. Ya hemos estado planificando el ahorro para conseguirlo, pero ahora falta que nos llame el juzgado para casarnos. Mucho me temo que serán unos cafres y a lo mejor nos hacen casarnos en Enero, ¡o peor! Más tarde incluso. Y así no tendría gracia. Igualmente uno de esos días no vamos a ir con la familia, que además serían dos viajes largos en coche y no queremos gastar tanta gasolina (y porque ya estamos agobiados y yo quiero pasar una navidad o nochevieja a solas con mi chico, seguro que lo entendéis... es lo que tienen las personas solitarias, jaja).